Abstract:
“Para ejercer el periodismo, ante todo, hay que ser buenos seres humanos. Las malas personas no pueden ser buenos periodistas. Si se es una buena persona se puede intentar comprender a los demás, sus intenciones, su fe, sus intereses, sus dificultades, sus tragedias”, Ryszard Kapuscinski. Esta cita es un ejemplo claro de la importancia y necesidad de la existencia de buenos periodistas, y de intentar suprimir a todos los que no se interesen por la búsqueda de lo verdaderamente importante y de la mejor manera de expresarlo para los ciudadanos. El periodismo posee un poder muy importante en la humanidad y es por esto que la información que transmite ha de ser veraz y no corrompida por ningún tipo de interés.
Esta profesión siempre ha estado muy cuestionada por la sociedad, y uno de los motivos principales de esto ha sido la ética, o más bien poca ética, de algunos periodistas a la hora de realizar su trabajo. No es raro escuchar frases como “qué poco profesionales son”, “el periodismo está comprado por los políticos” o “los periodistas son capaces de cualquier cosa por conseguir una exclusiva”. ¿Tendrán razón? ¿La ética y moral periodística está dejando de existir? ¿Los códigos deontológicos están de decoración?
De esto trata este Trabajo de Fin de Grado, pero desde una perspectiva mucho más cinematográfica. La selección de cuatro títulos míticos del cine americano (El gran Carnaval, Network, El precio de la verdad y Nightcrawler) y varios casos reales de las mismas épocas que estos filmes, darán las claves para ver si realmente es necesaria la ética y moral periodística y si se está dando uso de ella en estos diferentes períodos de tiempo, desde los años 50 hasta la actualidad. Y, por tanto, observar si existe algún tipo de evolución en la visión que se da del periodista y si tiene relación con la vida real.
"To exercise journalism, first of all, you have to be good human beings. Bad people can not be good journalists. If you are a good person you can try to understand others, their intentions, their faith, their interests, their difficulties, their tragedies", Ryszard Kapuscinski. This quote is a clear example of the importance and necessity of the existence of good journalists, and of trying to suppress all those who are not interested in the search for the truly important and the best way to express it for citizens.Journalism has a very important power in humanity and that is why the information it transmits must be truthful and not corrupted by any kind of interest.
This profession has always been very questioned by society, and one of the main reasons for this has been the ethics, or rather unethical, of some journalists at the time of carrying out their work. It is not uncommon to hear phrases like "how unprofessional they are", "journalism is bought by politicians" or "journalists are capable of anything to get an exclusive". Are they right? Is journalistic ethics and morals ceasing to exist? Are deontological codes decoration?
This is what this Final Degree Project is about, but from a much more cinematographic perspective. The selection of four mythical titles of the American cinema (The great Carnival, Network, The price of the truth and Nightcrawler) and several real cases of the same times that these films, will give the keys to see if journalistic ethics and morals are really necessary and if it is being used in these different periods of time, from the 50s to the present. And, therefore, to observe if there is some kind of evolution in the vision given by the journalist and if it is related to real life
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