Abstract:
El feminismo se ha convertido en un tema de interés para la opinión pública. Una encuesta realizada en 2018 por 40Db y CTXT concluye que el 52% de la ciudadanía española se reconoce como feminista, aunque esa proporción varía dependiendo del sexo de quien responde. Mientras que el 58,6% de las mujeres afirman ser partícipes de este movimiento, el número de varones que se reconocen feministas es de 45%. El sistema patriarcal, construido sobre la desigualdad de género se percibe a través de numerosos comportamientos sociales que discriminan a las mujeres por el simple hecho de serlo. El patriarcado es transversal a toda la sociedad. Está presente en la mayoría de las instituciones, administraciones, relaciones sociales, laborales y también en los imaginarios sobre los que se construye nuestra vida cotidiana. Ante la imposibilidad de abarcar todos estos comportamientos, hemos situado el enfoque sobre tres aspectos muy visibles y ampliamente extendidos entre las diferentes culturas: las instituciones religiosas, los estereotipos de belleza femenina y el trabajo sexual. Precisamente es sobre estos tres vértices sobre los que pivota el siguiente trabajo en el que se les da voz a representantes de estos colectivos sociales. Teólogas, activistas de asociaciones feministas, antropólogas y expertas teóricas sobre la construcción social del género tejen este reportaje que pretende ilustrar diferentes maneras de vivir y enfocar esta realidad desde una perspectiva personal y profesional.
Feminism has recently become a topic of interest to the general public. A survey carried out by 40Db and CTXT in 2018, concluded that 52% of the Spanish population defines themselves as feminists, albeit the significant divergence between sexes. Whilst 58,6% of Spanish women claim to be participants of feminists movement, the number of men who designate themselves as feminists drops to 45%. The patriarchal system, built on gender inequality, feds on numerous social behaviours that discriminate women for the simple fact of being so. Patriarchy spreads transversely throughout society. It is present in public institutions and administrations, in social and labor relations and also in our day-to-day interactions. Given the impossibility of covering all these behaviors, this work focusses and develops around three, out of the many, social dimensions in which gender discrimination is tangible; female beauty stereotypes, religious institutions and sex work. Representatives of these social groups ranging from theologians, feminist association activists, anthropologists to theoretical experts on the social construction of gender, lend their voices to weave this project to life. This report aims to illustrate and approach these different realities from a personal and professional perspective.
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