Abstract:
Este proyecto de investigación aborda la construcción de los estereotipos de género en
torno a la rabia. La reapropiación por parte de los feminismos de este afecto, proscrito
para las mujeres en los procesos de socialización, será reivindicada por su fuerza política
y subversiva. El estudio se centrará en los espacios de deconstrucción de dichos
estereotipos a través de la resignificación de saberes subyugados, concretamente
mediante las técnicas textiles. Está acotado al contexto chileno, en el periodo que va
desde la dictadura militar hasta el Estallido Social en 2019, trazando un hilo rojo entre las
arpilleras y las capuchas feministas. Las formas de resistencia textiles que han emergido
en estos periodos han permitido, no solo generar espacios donde organizar la rabia, sino
también crear representaciones visuales que revierten los estereotipos, especialmente
mediante las capuchas feministas. En estas páginas se examina, a través del artefactocapucha,
estas visualidades feministas y cuir que surgen en el espacio público con el
objetivo de escenificar indignaciones y reclamar visibilidad.
Por último, a casi cuatro años del Estallido Social, el presente estudio reflexiona, a través
de las entrevistas a tres mujeres que han empleado las capuchas en sus prácticas
artísticas, cuál ha sido el recorrido de este objeto, desde las protestas de 2019 hasta
nuestros días.
This research project addresses the construction of gender stereotypes surrounding rage.
The reappropriation of this emotion by feminisms, which was forbidden for women during
socialization processes, will be reclaimed for its political and subversive power. The study
will focus on spaces where these stereotypes are deconstructed through the resignification
of suppressed knowledge, specifically through textile techniques. It is limited
to the Chilean context, from the military dictatorship to the Social Outbreak in 2019, tracing
a common thread between "arpilleras" (textile art) and feminist hoods ("capuchas"). The
textile forms of resistance that have emerged during these periods have not only provided
spaces to channel rage but have also created visual representations that challenge
stereotypes, particularly through the use of feminist hoods. This work examines, through
the artifact of the hood, these feminist and queer visual expressions that arise in public
space with the aim of staging indignation and demanding visibility.
Finally, nearly four years after the Social Outbreak, this study reflects on the journey of this
object, from the 2019 protests to the present day, through interviews with three women
who have used hoods in their artistic practices.
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