Abstract:
La detección de medicación inapropiada (MI) en los pacientes crónicos
constituye el punto de partida para la optimización de su farmacoterapia, siendo de
especial interés en aquellos que presentan polimedicación y edad avanzada, por su
mayor susceptibilidad a los problemas relacionados con la medicación. Para la
consecución de este objetivo, es necesaria la revisión periódica del tratamiento.
Aplicada en un paciente concreto, sus conclusiones sirven de ayuda en la toma de
decisiones clínicas orientadas al paciente. De manera análoga, la investigación
mediante la revisión de los tratamientos de una muestra representativa de la población
de pacientes crónicos, polimedicados y de edad avanzada, nos permite detectar si
existe medicación potencialmente inapropiada (MPI) y, en su caso, estimar su
prevalencia, características y distribución. La información así obtenida, puede ser de
utilidad para orientar las decisiones en cuanto al diseño y planificación de estrategias
de intervención dirigidas a minimizar sus efectos negativos a nivel poblacional. Entre
las distintas herramientas que permiten sistematizar la tarea de la revisión farmacoterapéutica, los criterios STOPP-START han sido ampliamente utilizados en
estudios de investigación en las últimas décadas; entre las razones fundamentales se
encuentran: a) han sido validados en distintos países y entornos, b) su aplicación es
rápida (porque se fundamentan en métodos explícitos de revisión), y c) requieren
escaso juicio clínico, lo que reduce la variabilidad inter-observador.
The detection of inappropriate medication (IM) in chronic patients is the starting
point for optimizing their pharmacotherapy, being of special interest in those with
polypharmacy and advanced age, due to their greater susceptibility to medicationrelated
problems. To achieve this goal, periodic review of treatment is necessary.
Applied to a specific patient, its conclusions help in making patient-oriented clinical
decisions. Similarly, research by reviewing the treatments of a representative sample
of the population of chronic, polymedicated and elderly patients allows us to detect if there is potentially inappropriate medication (MPI) and, where appropriate, estimate its
prevalence. characteristics and distribution. The information thus obtained can be
useful to guide decisions regarding the design and planning of intervention strategies
aimed at minimizing their negative effects at the population level. Among the different tools that allow the task of pharmacotherapeutic review to be systematized, the
STOPP-START criteria have been widely used in research studies in recent decades;
Among the fundamental reasons are: a) they have been validated in different countries
and environments, b) their application is rapid (because they are based on explicit
review methods), and c) they require little clinical judgment, which reduces interobserver
variability.
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