Evolución de la fuerza y velocidad de jugadores de fútbol en edad de maduración

Abstract

El fútbol se caracteriza por acciones intermitentes de alta intensidad, dependientes de la fuerza y la velocidad. En etapas de formación, tanto la fuerza como la velocidad dependen del proceso de maduración, el cual hace referencia a los cambios estructurales y funcionales que sufren las personas durante el proceso de crecimiento. Para ello, se necesita evaluar el estado madurativo (momento en el que se encuentra la maduración) de los jóvenes, siendo la maduración somática el indicador más utilizado en el ámbito deportivo. La técnica más adecuada para evaluar el estado madurativo de los jóvenes futbolistas es el Pico de Velocidad de Crecimiento (PVC) o Peak Heigth Velocity (PHV), propuesto por Mirwald et al. (2002). A partir del PHV (punto de máximo crecimiento en altura durante la adolescencia) y con la evaluación de los años desde/hasta el PHV podemos clasificar el estado madurativo de una persona en Pre, Mid, o Post-PHV. Para obtener esta medida, se precisa de distintos datos antropométricos (peso, altura, talla sentado y longitud de pierna) y la edad. El objetivo de esta revisión fue examinar el estado de la bibliografía respecto a las diferencias en fuerza y velocidad entre jóvenes futbolistas con distinto estado madurativo. Para ello, se llevó a cabo una búsqueda en PubMed y Google Académico con las palabras clave: “PHV”, “velocity”, “strength” y “soccer”. Tras aplicar los criterios de inclusión/exclusión se obtuvo un total de 6 artículos. Las tablas 1 y 2 muestran los resultados obtenidos en los distintos trabajos. En las tablas 3 y 4 se pretende sintetizar la información relevante obtenida de los distintos trabajos para una presentación resumida de los resultados. En ellas se muestran mayores niveles, tanto de fuerza como de velocidad, en jugadores de fútbol con un estado madurativo más avanzado. En conclusión, tras la revisión realizada, podemos afirmar que los jóvenes futbolistas cuyo estado madurativo es más avanzado, tienen mayores niveles de fuerza y velocidad que los futbolistas jóvenes con un estado madurativo menos avanzado.